Memoria Investigaciones en Ingeniería; Núm. 4 (2005); 26-50
Editor
Universidad de Montevideo
Notas
Es bien conocido que la electrodinámica de Maxwell—como se le entiende usualmente en la actualidad—aplicada a los cuerpos en movimiento, conduce a asimetrías que no parecen ser inherentes a los fenómenos. Tomemos, por ejemplo, la acción electrodinámica recíproca entre un imán y un conductor. Aquí, el fenómeno observado sólo depende del movimiento relativo entre el conductor y el imán, mientras desde el punto de vista convencional se hace una distinción muy marcada entre los dos casos en los que uno de los dos cuerpos está en movimiento. Si el imán está en movimiento y el conductor en reposo, aparece en la vecindad del imán un campo eléctrico con una cierta energía definida, produciendo una corriente en los lugares donde se sitúan partes del conductor. Pero si el imán está estacionario y el conductor en movimiento, no aparece ningún campo eléctrico en la vecindad del imán. En el conductor, sin embargo, encontramos una fuerza electromotriz, para la que no hay una energía correspondiente,pero que da origen—suponiendo la igualdad del movimiento relativo en los dos casosdiscutidos—a corrientes eléctricas con la misma trayectoria e intensidad que lasproducidas por las fuerzas eléctricas en el primer caso.